Medio Ambiente
Fiebre del oro en Paraguay amarga a los productores de té
Durante siglos, el pueblo guaraní ha cultivado yerba mate en sus tierras ancestrales. Hoy, afirman que la minería de oro está contaminando su medio ambiente con mercurio y arsénico.
![Un minero filtra tierra con agua en una cantera de oro en Paso Yobai, Paraguay. El descubrimiento de oro en este pequeño pueblo yerbatero ha desatado una fiebre marcada por las ganancias para algunos y la agitación para otros, mientras agricultores y comunidades indígenas luchan por proteger sus tierras. [Daniel Duarte/AFP]](/gc4/images/2025/04/17/50059-paraguay1-600_384.webp)
Por AFP |
PASO YOBAI, Paraguay -- En un pequeño pueblo de Paraguay, se está gestando un enfrentamiento entre los productores tradicionales de yerba mate, un té de hierbas amargo popular en toda Sudamérica, y los mineros en busca de un tesoro más brillante: oro.
La fiebre del metal precioso está enfrentando a los cultivadores de mate y a los grupos indígenas contra las operaciones en expansión de los mineros a pequeña escala que, hasta hace poco, eran sus vecinos, no sus enemigos.
"Ellos (los mineros) han destruido todo... los canales, los manantiales, los pantanos", declaró Vidal Britez, presidente de la Asociación de Productores de Yerba Mate de la localidad de Paso Yobai, a unos 210 kilómetros al oriente de la capital de Paraguay, Asunción.
"Se puede ver la contaminación por los peces muertos. El agua ha cambiado de color", explicó a AFP este hombre de 56 años.
![Una vista aérea muestra estanques utilizados para la filtración de oro junto a una plantación de yerba mate en Paso Yobai, Paraguay. Desde que los mineros encontraron oro en esta tranquila aldea agrícola, la fiebre del oro ha traído ganancias para algunos y agitación para otros, mientras agricultores y comunidades indígenas luchan por defender sus medios de vida. [Daniel Duarte/AFP]](/gc4/images/2025/04/17/50060-paraguay2-600_384.webp)
La yerba mate, una infusión verde que se bebe de una calabaza con una pajita metálica, tiene profundas raíces en Paraguay. El pueblo guaraní ha cultivado el árbol que produce sus hojas durante siglos, incluso en Paso Yobai.
Pero cuando un minero ecuatoriano descubrió pepitas de oro en un arroyo en la década de 1990, la suerte del pueblo cambió. Uno de cada seis de sus 30 000 habitantes vive ahora de la minería y actividades afines, y los cultivadores de mate, indignados, afirman que están siendo marginados.
Se quejan del daño ambiental que causa el mercurio utilizado para extraer el oro y el arsénico liberado en el proceso.
El lugar "es la cuna de la yerba mate", expresó indignado Britez, mostrando a AFP hojas de mate cubiertas de polvo minero que, según él, son rechazadas por los compradores.
Las tensiones aumentaron en marzo, cuando agricultores y mineros armados casi llegaron a los golpes.
No se reportaron heridos.
Pero desde entonces, pequeños grupos de cultivadores de yerba mate han estado acampando alrededor de Paso Yobai para evitar que los mineros excaven más canteras o pozos.
Camino hacia una vida mejor
En apenas unos años, Paso Yobai ha pasado de ser un tranquilo y bucólico asentamiento a un frenético hormiguero de actividad con filas de camiones que transportan arena a piscinas donde se procesa el oro.
Los agricultores afirman que hay más de 300 excavaciones alrededor de la ciudad, la mayoría de ellas ilegales.
Cada excavación puede producir alrededor de un kilogramo de oro en uno o dos meses, y para algunos, el tesoro escondido durante mucho tiempo de la ciudad ha resultado ser una bendición.
Los aproximadamente 2 000 mineros artesanales de Paso Yobai ganan alrededor de 20 dólares al día, casi el equivalente al salario mínimo mensual del país.
"Muchas familias lograron mejorar sus viviendas, lograron que sus hijos estudiaran en las universidades", señaló a AFP el minero Rubén Villalba.
Los cultivadores de mate, por el contrario, apenas llegan a cubrir gastos la mayor parte del tiempo.
"Ninguna queja"
En 2024, Paraguay exportó 600 kilos de oro extraído principalmente en Paso Yobai, lo que generó 260 000 dólares en regalías para el gobierno, según el viceministro de Minas y Energía, Mauricio Bejarano.
En una entrevista con AFP, se jactó de que "la rentabilidad está garantizada" mientras Paraguay busca expandir su incipiente sector minero del oro.
En cuanto a las preocupaciones medioambientales, indicó que "hasta donde yo sé, no ha habido ninguna queja".
El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente ha observado en un informe que Paraguay no ha realizado un inventario nacional de contaminación por mercurio.
Dos universidades paraguayas están investigando el tema pero aún no han presentado sus resultados.
Rubén Irala Galeano, ingeniero agrónomo e investigador del proyecto, explicó a AFP que los primeros hallazgos apuntan a niveles "alarmantes" de mercurio y a "un crimen ecológico en Paso Yobai".
Mariano Benítez, un líder indígena de un asentamiento cercano, precisó que la contaminación ha dificultado la supervivencia.
"Los peces se están muriendo. No tenemos agua potable", comentó.